Estábamos deseando que llegara la primavera, pero una vez comienza no todos nos sentimos tan contentos. Se trata de una época de cambios bruscos de temperatura, presión atmosférica y humedad en el ambiente. Esta estación representa el inicio de un ciclo biológico, que se caracteriza por la renovación de las funciones vitales después del largo invierno. Es habitual que sintamos cambios el organismo, como cansancio, agotamiento, somnolencia, falta de motivación, apatía, insomnio e irritabilidad. Este trastorno de carácter leve se encuentran bajo la denominada astenia primaveral.
La astenia primaveral cede conforme el organismo se va adaptando, esto puede durar unos días o varias semanas. De todas formas, no cabe duda de que el mejor tratamiento sea la prevención y, en este sentido, se aconseja tener un estilo de vida saludable: seguir una dieta equilibrada, respetar los horarios de las comidas, dormir las horas necesarias y hacer ejercicio físico de forma regular. Estos hábitos son fundamentales a la hora de prevenir o combatir este trastorno. Si es necesario, es conveniente cambiar los hábitos cotidianos adoptando otros más saludables que pueden ayudar a hacerla más llevadera. A continuación, se dan algunos consejos que pueden ser útiles.
- Cuida tu alimentación: La primavera es un buen momento para rediseñar la dieta y aumentar en ella la presencia de cereales, legumbres, frutas y verduras de temporada. Procura evitar los llamados azúcares rápidos y opta por los hidratos de carbono presentes en cereales, fruta y verdura. Da preferencia a los productos integrales más ricos en fibra, vitaminas y minerales. Evita o reduce el consumo de bebidas excitantes como el café. Una dieta equilibrada te ayudará a mantener un buen tono vital.
- El Ginseng es una raíz de sustancias activas para el cuerpo y la mente. Nos ayuda a restaurar las fuerzas después de una enfermedad, por ejemplo, fortifica el sistema inmunitario, y nos aporta un extra de energía.
- La Jalea Real es un gran estimulante y tonificante, nos ayuda a recuperar la plenitud de nuestras capacidades físico-mentales y nos ayuda a aumentar la capacidad de concentración.
Aprovecha que el día tiene más horas de luz para ir al campo, disfrutar de la naturaleza y dar paseos de forma relajada, en un espacio al aire libre, sin contaminación ni ruidos. Recuerda que es una época ideal para realizar ejercicio. Te ayudará a liberar tensiones y predispone al cuerpo para el descanso nocturno. También es muy importante que respetes tus horas de sueño. Dormir tiene un efecto reparador sobre el organismo y fortalece el sistema inmune de defensas. Mantén una actitud positiva y ríete mucho, la risa hace que el cerebro libere endorfinas y el buen humor facilita el tránsito del estado de vigilia al del sueño.
Esperamos que con estos consejos puedas superar o aliviar de la mejor manera posible la tan temida Astenia Primaveral. Es el momento de disfrutar del buen tiempo 😉