Eficacia terapéutica de la suplementación crónica con Rodiola, L-Triptófano y los cofactores necesarios para la síntesis de serotonina en pacientes odontológicos con alto grado de estrés
José Joaquín Merino, María Eugenia Cabaña-Muñoz
CIROM (Murcia, España)
De todos es sabido que una dieta saludable y equilibrada requiere de niveles adecuados de aminoácidos. El estrés puede reducir los niveles de L-Triptófano, un aminoácido esencial que debemos obtenerlo a través de la dieta. Este aminoácido junto a la vitamina B6, magnesio y s-AME (S-Adenosil-metiona) son indispensables para sintetizar niveles adecuados de serotonina, neurotransmisor relacionado con el control de las emociones y el estado de ánimo. Niveles adecuados de serotonina contribuyen a las sensaciones de bienestar, relajación, concentración y autoestima.
El estrés crónico puede reducir los niveles de serotonina que, a su vez, puede contribuir a la progresión de ciertas enfermedades neuropsiquiátricas (ej: depresión).
Por ello, la suplementación con niveles balanceados de L-Trp, de vitamina B-6 y/o magnesio y adaptógenos como la Rodiola, podría aumentar de ¨forma natural¨ la biodisponibilidad de L-Trp y de serotonina y así, aumentar la resistencia al estrés.
Dado que el estrés puede generar déficits de L-Trp y que la suplementación crónica durante 40 días consecutivos con la presente formulación (Fito Estrés, YNSADIET S.A: a base de Rodiola, L-Trp y cofactores como la vitamina B6 Magnesio y s-AME) revierte el déficit sistémico de L-Trp a valores normales en pacientes con estrés, ansiedad, bruxismo, (aprietan y/o rechinan los dientes, entre otras disfunciones), al tiempo que aumenta los niveles sistémicos de serotonina, podemos concluir su efecto ansiolítico por reducción del cortisol sistémico (hormona del estrés).
La glutamina y el L-triptófano son los dos únicos aminoácidos que atraviesan la barrera hematoencefálica, por lo que puede directamente formar serotonina, en presencia de niveles adecuados de sus cofactores.
Por otro lado se sabe que personas con estrés presentan unos niveles elevados de “Cortisol” (la llamada hormona del estrés) por lo que es crucial comprender las bases moleculares del uso terapéutico de ciertos adaptógenos como la Rodiola (presente también en Fito Estrés) en pacientes con alto grado de tensión emocional, estrés, bruxismo y otros; De hecho, esta planta potencia, no sólo la formación de serotonina, sino que además junto a las sinergias indicadas (cofactores), promueven efectos ansiolíticos al reducir los niveles sistémicos de cortisol, y aumentan la resistencia al estrés crónico.
Dado que altos niveles de cortisol incrementan los niveles de aminoácidos excitatorios como glutamato, la suplementación con adaptógenos tipo Rodiola y las sinergias indicadas produce también una ¨corrección metabólica¨ en los niveles de otros aminoácidos desregulados por estrés (bien por defecto o exceso), que alcanzan niveles normales tras 40 días de suplementación en dichos pacientes.
Otros aminoácidos medidos como la glutamina, ha mostrado efectos protectores a nivel intestinal. Se sabe que los aminoácidos ramificados de cadena larga Isoleucina (Ile), Leucina (Leu) y Valina (Val) junto con Phe y Tyr compiten con la absorción del Triptófano, por lo que pueden reducir la absorción del L-Trp y por ende, disminuir la producción de serotonina; Como consecuencia, se reduciría su eficacia terapéutica en éstos casos bajo situaciones de depresión y/o estrés/ansiedad exacerbados o en pacientes con problemas intestinales. La comparativa de los niveles de L-Trp tras 40 días de suplementación crónica frente a sus niveles basales (antes de la toma), muestra que el déficit sistémico inicial de L-Triptófano es revertido a valores normales, al tiempo que aumentan los niveles sistémicos de serotonina. Colectivamente, los resultados indican que las sinergias empleadas junto al adapatógeno Rodiola son muy eficaces para prevenir los efectos perniciosos del estrés crónico mantenido. También podría ser útil para reducir la sintomatología de trastornos que cursen con un déficit de L-Trp como ansiedad en fibromialgia, menopausia o en desórdenes alimenticios y es útil frente a problemas de sueño, contracturas musculares, bajo situaciones de depresión.
Los autores del estudio (Dr. JJ Merino y Dra. M.E. Cabaña-Muñoz) quieren destacar el uso responsable crónico de la ingesta de L-Triptófano y Magnesio cuando se verifique previamente el déficit sistémico de L-Trp por HPLC o bien desregulaciones sobre otros aminoácidos (defecto/exceso). Agradecimientos: Dr. Pedro Palomo (I+D YNSADIET S.A).