La clave de una dieta equilibrada está en ingerir cantidades moderadas, de alimentos muy variados, distribuidos en 4-5 comidas al día. Para los mayores de 65 años, es muy importante llevar un control adecuado de la alimentación y para ello Ynsadiet os da los siguientes consejos:
-Recomendamos una dieta suficientemente energética, pero no muy calórica ni rica en grasas, para evitar el aumento de peso y el exceso de colesterol y grasas saturadas.
-Cantidad suficiente de proteínas en la dieta. Las proteínas son muy importantes para el mantenimiento de la masa ósea y muscular, y un aliado perfecto para ello es nuestro batido KL-Protein que aportará un extra de proteina ideal para media mañana y durante la merienda.
-En caso de padecer diabetes, se recomienda el control de alimentos altos en azúcares y con un índice glucémico elevado.
-En personas con altos niveles de triglicéridos en sangre, se recomienda el control de las grasas saturadas y depuración del organismo cada dos meses, para facilitar la labor depurativa al hígado.
-La osteoporosis se asocia a un déficit de calcio mantenido durante largos periodos de tiempo, de manera que en los adultos mayores de 65 años las necesidades de calcio no están aumentadas, pero sí se debería asegurar una ingesta mínima de dos a tres raciones de lácteos desnatados o semidesnatados diarias para garantizar las necesidades básicas, y al menos media hora de exposición al sol (simplemente dando un paseo) para que la vitamina D que este nos proporciona ayude a la fijación del calcio que ingerimos.
Teniendo en cuenta todo lo anterior, la dieta ideal para mayores de 65 años debería contener:
– 5 o más raciones de fruta diaria.
– Al menos 2 raciones de verdura diaria.
– De 3 a 4 raciones semanales de carnes poco grasas.
– De 3 a 4 raciones semanales de pescado o marisco.
– De 2 a 4 raciones semanales de legumbres (lentejas, garbanzos, alubias, etc.)
– De 2 a 3 raciones semanales de pasta o arroz.
Por todo ello, habría que promover la variedad en la alimentación para fomentar una buena ingesta nutricional. Será muy importante, por tanto, el consumo de alimentos frescos y de temporada.
La alimentación de nuestros mayores debe mimarse mucho más que la nuestra ya que su cuerpo no tolera tan bien las novedades o los excesos. Por ello, es muy importante que visiten su médico de cabecera y realicen analíticas con frecuencia para chequear que todo en su organismo vaya bien. En los centros especializados de mayores todo estos factores los tienen en cuenta y por ello es se convierten en los espacios más seguros en donde pueden estar.