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Con la llegada del verano a menudo relajamos nuestras rutinas y somos muchos los que en el período estival cogemos algunos kilos que luego nos cuesta perder. Las comilonas en familia, las salidas nocturnas, los cambios de horarios, hacen que comamos más y peor. Si no queremos lamentarnos en septiembre, más vale seguir unos sencillos consejos para disfrutar en verano sin caer en los excesos y sin que se mueva la aguja de la báscula.

  • Hacer las 5 comidas al día. Es importante continuar con los buenos hábitos adquiridos durante el año. En esta época una opción perfecta para almuerzos y meriendas es la fruta fresca, fácil de transportar a la playa, la piscina… (sandia, melón, ciruelas, melocotones, piña…).
  • No abandonar el ejercicio físico. Es una buen momento para hacer más ejercicio al aire libre aprovechando el buen tiempo y la disponibilidad de más tiempo pero siempre en un horario aconsejado (primeras horas de la mañana o últimas de la tarde) para evitar las horas de más calor. Puedes optar por ejercicios aeróbicos como la natación, correr o andar por la playa. O practicar deportes que el resto del año te resultan más inaccesibles (puedes probar el remo, paddle surf, vóley playa, que además te harán disfrutar de grandes ratos con amigos).
  • En cuanto a las formas de cocinado, te aconsejamos que sean las más sencillas posibles: de primero siempre podemos optar por ensaladas, gazpachos, cremas o sopas frías. De segundo, elige la plancha o la parrilla para tus carnes y pescados y de postre, infusiones frías.
  • Es siempre aconsejable el consumo de legumbres durante todo el año, pero en este periodo estival tómalas mejor en ensaladas en lugar de guisadas, al igual que el arroz, las pastas y las  patatas. En este caso, serán platos únicos añadiéndoles una lata de atún al natural o pechuga de pavo, con lo que tendrás un plato muy veraniego y con pocas calorías.
  • Cuando salgas a comer o tomar algo en las terrazas es aconsejable que elijas la cerveza sin alcohol o agua con gas con un poquito de limón en lugar de refrescos y/o bebidas alcohólicas ya que así evitarás sumar muchas calorías, azúcares y gases a tu dieta. En lo que se respecta al aperitivo o tapita evitaremos todos aquellos alimentos fritos, patatas industriales… Opta por mariscos frescos o en forma de salpicón de marisco, pepinillos, pulpo o sepia a la plancha, ya que son menos calóricos y más refrescantes.
  • En este periodo, seguramente te permitas más a menudo un delicioso helado (ricos en azúcares, grasas saturadas e hidrogenadas) de postre, en lugar de la fruta. Recuerda que deben ser ocasiones puntuales y, en esos casos, es mejor que elegir polos o sorbetes, ya que los típicos helados de crema tienen muchas más calorías. También puedes preparar fácilmente opciones caseras mucho más saludables con yogur natural y fruta fresca.
  • En este periodo vacacional se suele comer mucho al aire libre, haciendo barbacoas picnics campestres o la típica comida en la playa. En estos casos te recomendamos sobre todo el llevar platos frescos y que no requieran mucha elaboración. Si vas a hacer una barbacoa, en lugar de la clásica carne de cerdo, opta por pollo o conejo y acompáñalo con una parrillada de verdura para que la combinación sea más apetecible. En el caso de comidas playeras llévate una ensalada campera o de arroz en lugar de los bocadillos o tortillas de patatas y filetes rebozados. Y recuerda llevar siempre mucha agua y frutas frescas para combatir el calor.

Y si necesitas ayuda profesional para diseñar un programa adaptado a tus necesidades en esta época del año, también en verano puedes contar con el asesoramiento de las nutricionistas de Dietasol y trazar con su ayuda tu plan personalizado.

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